La Gula

El pecado de la gastrimargia

Demonio: BELCEBÚ  

Introducción

Todos los pecados capitales provocan gratificación emocional, física o mental, todos ellos surgen de los instintos más bestiales del ser humano y son parte de su naturaleza más primigenia. ¿Por qué hemos decidido negarnos a nosotros mismos obligandonos a seguir una serie de normas que no nos permiten experimentarnos en esta existencia plenamente? ¡Que masoquistas somos entonces! ¿Nos gusta acaso el placer de ser negados, de ocultar nuestra verdadera esencia? Así pues todos los hombres son pecadores, nadie se libra del yugo de la culpabilidad. Por eso mismo crearon el Pecado Original, el cual fue fornicación -Lujuria- ¡Tú mismo eres origen de un pecado, tu existencia es gracias a un pecado! Se aseguraron así los magnates de las religiones y sadistas que llevan esta empresa que nadie estuviera exento de pecado y así poder asegurarse de que todos necesitarían el Dios benevolente que ellos les impondrían para saldar su deuda como si de unos criminales se tratase. ¿Por qué no hacemos de estas culpas establecidas una ventaja? Veneremos pues los pecados mortales, pues ellos son la más viva imágen del ser humano, y así conseguiriamos eliminar esa ferviente necesidad de purga del alma e intelectual, es de lógica intentar convertir algo malo en beneficioso en vez de tratar de eliminarlo por completo, traer a nuestro terreno y hacer que nos apoye a nosotros mismos en el proceso de nuestra vida. Biblia Satánica, de Anton Lavey

El placer y el dolor, como la belleza, se encuentra en el ojo del que mira

El vicio

La sustancia se manifiesta en nuestro cuerpo llevándonos a una experiencia extracorpórea o ilusoria y nos provoca esa adicción por dicha sustancia.

La virtud

Hambre de sabiduría, hambre espiritual. Deseo de disfrutar de una existencia vital y plena, sin excesos pero si con placeres.

El famoso pecado de la gula es sin duda el más ignorado por la religión cristiana, pues es bastante evidente que este mundo lo gobierna la gula. Pero, este pecado no solo habla sobre comer, sino toda sustancia notiva de la cual se abuse, y toda sustancia de la que se abuse resulta ser notiva tarde o temprano. Todo comportamiento destructivo está incluido en la gula, toda obsesión por un comportamiento obsesivo: comer en exceso, el alcoholismo, anorexia, sobrepeso, las drogas, etc. El hecho de hartarse a comer es innecesario en el ser humano, pues como dicen los médicos "El cuerpo humano está hecho para comer hasta la muerte". Detrás de este pecado existe otra razón escondida, pues ¿cuándo un ser no necesita comer para subsistir como puede pecar de gula? Una faceta que nosotros quizás no podamos llegar a entender pero la gula espiritual también existe, el "hambre espiritual", es decir, que no solo incluye sustancias materiales, como puede ser lo anteriormente mencionado, sino otro tipo de sustancia que sustenta al ser en si en un circulo vicioso, como puede ser cualquier comportamiento contraproducente que lleve a una conducta monomaníaca. ¿Qué más puede ser pecado para la gula si no es comer? os preguntaréis, yo os responderé. Cualquier abuso que hagamos de algo pensando que lo necesitamos, como una droga, está relacionado con el pecado de la gula, pero no todo es perjudicial. Podemos hablar de vicio y hablariamos de abusos como la obsesión por un juego, un libro, un personaje, un tipo de comprotamiento o situación, o incluso obsesión por el saber. Todo lo que engulla el alma para su mantenimiento es superfluo para el cristianismo, pero yo no lo veo del todo así. Está claro que el pecado está ahí, abusar de sustancias que son mortales para nuestro cuerpo, pero el hambre espiritual no siempre es malo, así como comer para la satisfacción propia tampoco. Para que se entienda mejor, observemos El mito de la caverna, de Platón. Si el prisionero que baja del mundo de las ideas le cuenta a sus compañeros lo que ha visto, el estado que está estsablecido en caverna podría asegurar que su ansía de sabiduría es tanta que le ha llevado a pecar contra sus creencias y destruirlas por completo. ¿No sería eso gula? Por lo tanto relacionamos las ganas de comer con las ganas de saber, por lo tanto este pecado está ligado a la envidia. Por lo tanto, yo considería un pecado abusos como el sobrepeso y la anorexia, el alcoholismo y las drogas. Consideraría bueno el placer de una buena comida y la libertad de elegir que podemos comer, así como la faceta hablada sobre la sabiduría. ¡Si tu comida espirituales la sabiduría adelante! El problema de los pecados es que son mortales y condenables sin reparos por el cristianismo, cuando, como todo en este mundo, todo tiene su parte buena y mala.

EXISTENCIA VITAL en vez de SUEÑOS ESPIRITUALES
¿Por qué has de castigarte privandote de las delicias de este mundo? Una buena comida siempre da energía positiva, deberíamos poder decidir si queremos deleitarnos o no con estos placeres. Debes recordar que los extremos son malos y siempre hay que permanecer en el centro: todo aquello que no te apoye ni te permita ser tu mismo es nocivo para ti. ¡Permitamonos ser libres de poder comer sin sentir que esa culpa se gesta en nuestro interior! ¡No permitámonos que nadie límite nuestras fronteras y nos ate con una cuerda a un pilar construido por dogmas! Líberate de lo que no te define, deshazte de todos los prejuicios que tienes y empieza a vivir. Recuerda: Nuestra demencia es ya suficientemente magna como para intensificarla con un incentivo.