Hace tiempo comezamos a hablar sobre los guías espirituales, hoy vamos a indagar un poco más en este tema, relacionándolo con otros temas colindantes e intentando explicar en profundidad la verdadera esencia de estas prácticas y lo que se esconde detrás. Sé bien lo que dijimos hace tiempo, pero yo voy a dar mi punto de vista y quien quiera aceptarlo, que lo acepte. Quien no quiera, está en su pleno derecho.
¿Es beneficioso para uno mismo tener un guía espiritual? ¿Realmente existen o son meras tulpas? ¿Pueden darnos poderes especiales? ¿Hasta que punto puede ser perjudicial para nosotros y para quienes nos rodean?
Dios es mi guía
Tener un guía espiritual es como tener una religión, realmente el guía es como un Dios, le ofreces tu fe y admiración. Aunque muchos creen que la relación no es la misma, yo estoy seguro de que ambos poseen la misma plantilla. Se busca tener un ser con el que conectar, al igual que se busca con Dios, un ser que te haga único y el elegido. A ese ser le adoras y tienes una relación de amor con él, esto puede ocurrir tanto con Dios como con un Guía.Al hablar de religión la gente rápidamente lo vincula con esclavismo y engaño, con servidumbre, pero es que estos aspectos también aparecen con un guía espiritual, sino te cuidas de sus engaños. La gente que profesa una fe hacia un Dios siente un amor especial, divino, que le hace creer que tiene una relación amorosa con ese Dios. ¿Nunca habéis leido la Biblia? Seguramente no, pero hay muchos apartados en los que aparece esta relación de amor entre humanos y Yahveh, es decir, de amor espiritual, de amor místico. Seguramente conoceréis al autor Ramon Llull y su libro "Amic e Amat", en el cual muestra su afecto hacia Dios, llamándolo amigo, como si entre ambos hubiera una relación amorosa fuerte. Y es que esto es la fe, la creencia se refuerza con el amor. Si no lo sentiste, no serás capaz de comprenderlo del todo.
La gente busca continuamente ser el ungido, el elegido, el único de Dios, busca tener una experiencia única con él, ser su Uno, fusionarse con él. Eso es también lo que uno busca al tener un guía espiritual, ha de pasar por ese proceso para poder evolucionar. El problema es creer que necesitamos de algo o alguien en nuestro proceso, pues estas prácticas solo nos echan para atrás en nuestra evolución. Hemos de caminar solos hacia adelante.
¿Es la religión mala? Para nada ¿Son los guías perniciosos? No. Es depende de como enfoques esa relación, depende de como decidas actuar y aplicarlo a tu vida. No hay nada malo o bueno, depende de las aplicaciones que le des. Desde luego, fiarte de un Dios y darle tu adoración sin razón alguna es absurdo. Ese Dios o Guía no necesita tu adoración y si la necesita, es que no es mucho mejor que tú, más bien está a tu mismo nivel. A quien se debe adorar es a uno mismo, no hemos de subyugarnos bajo la figura de un ser superior, porque no necesitamos a tal ser, nosotros somos nuestro propio salvador. Nadie salvo nosotros puede ayudarnos.
Si decides tener un guía, que tu soberbia no te suba demasiado el ego ante los demás religiosos que tú consideras meros ignorantes. Entre tú y ellos existe una mínima diferencia. Quizá la honestidad sería digna para ti, algún día.
¿Guía espiritual o tulpa?
El problema que nos surge rápidamente es si este ser es real o mera creación nuestra. No es que al ser algo obrado por nuestra mente sea menos importante o tengamos que dejarlo de lado y aceptar nuestra esquizofrenia, no. Es simplemente que, tú, al ser el creador de dicho "ser", debes hacerte cargo de él responsablemente. Un tulpa es un ser creado por la mente que está vivo, piensa y siente, actúa por su cuenta como un espíritu normal, por eso es tan complicado diferenciarlos. Si tú no fuiste consciente en su creación, seguramente: primero, no estés preparado para tener un tulpa; y segundo, deberías tratar de arreglar el asunto lo antes posible.No tengo un sistema ni una fórmula para saber si ese ser es real o un tulpa, no puedo deciros exactamente, solo vosotros podéis saberlo. Realmente no importa que tipo de ser sea, en ambos casos tú tienes que demostrar que tienes el control o todo se te irá de las manos catastróficamente.
Un Guía espiritual podría ser cualquier tipo de espíritu ya existente, sería un espíritu del "otro lado" o de "otra dimensión". Mientras que un tulpa es un amigo imaginario creado por y para ti. No soy un experto en "la otra dimensión" ni confirmo su existencia, ¿quién sabe si todo son tulpas y creaciones ajenas? Yo no lo sé. Lo que te debe importar es que tú debes cuidar de ese guía o tulpa, al igual que le exiges que él cuide de ti.
El problema de los tulpas es que son inestables, por culpa nuestra. Nuestra mente puede influenciarlos, ya que es ella misma quien los crea. ¿Qué pasaría si, sin querer, creasemos a un Tulpa malvado? ¿A un demonio o al propio Satanás, el arquetipo de maldad pura? ¿O al Yahveh del antiguo testamento, cruel y vengativo? Sin querer tu mente podría apoyar esta existencia y de la nada crearías un tulpa monstruoso que jamás querrías ver frente a ti. Así podría pasar con el famoso Cthulhu, un monstruo inventado por el escritor Lovecraft. Aunque esto lo sabe la mayor parte de la gente, otros se empeñan en pensar que es totalmente real. Otros incluso, aun sabiendo que es falso, deciden adorarle cual Dios. Pero es que este monstruo no es bondadoso, es pérfido y debastador, ¿por qué adorar y apoyar la existencia de un ser tan horrible? La estupidez humana no tiene fin. Podríamos crear, conjuntamente, un ser indescriptible que destruyera nuestra psique.
Otro ejemplo sería el famoso Slenderman, ya hemos comentado este ejemplo con anterioridad. La creencia apoya su existencia y la mente colectiva podría crearlo. Estoy seguro de que a nadie le gustaría encontrarse con él en este plano físico. Ese es el problema de los tulpas, y aquí entra la ley de atracción. Si con nuestra mente cambiamos y creamos el mundo, eso quiere decir que cada mente pensante tiene un mínimo de control y poder sobre la realidad manifestada. Eso supone muchos problemas. Cada cual podría, por error y sin mala intención, apoyar estas manifestaciones funestas con su mente y crear seres malvados. Ya que si piensas en negativo, atraes negativo, crearás negativo.
Tú puedes ser el padre de tu aniquilación, al menos psicológica. Si no eres lo suficientemente fuerte o experimentado puedes acabar con tu cordura y afectar a quienes te rodean. Da igual si es un tulpa o un guía real, en ambos casos fiarte de ellos puede traerte problemas.
El precio del poder
No todos los espíritus o tulpas tienen buena fe, al menos al tulpa puedes moldearlo ya que es tu creación y si algo sale mal, ten por seguro que será culpa tuya. En cambio, con los espíritus normales, no puedes moldearlos ni cambiarlos, ellos son así, como las personas, con distintas personalidades, virtudes y pecados.
Yo creo que sí pueden proporcionarte poderes, guía espiritual -qué para eso están, ¿no?-, capacidades psíquicas. Pero obviamente no es gratis, nada es gratis. Todo tiene un precio, y aquí podríamos quizá hablar de una especie de "pacto", el famoso pacto con Satán en el que "vendes tu alma". El alma no se puede vender, pero digamos que les das una parte muy importante de ti y cuando la pierdes, ya no eres el mismo. Por eso muchos acaban dementes.
Los guías suelen pedirte algo a cambio casi siempre, debes dejarles entrar, y muchas veces durante ese proceso pierdes tu yo real, tu conciencia. Seguramente los mediums y adivinos, u otras personas con poderes extraordinarios (no todas, ojos, la mente humana tiene poderes ocultos a desarrollar) sean personas con tulpas o guías. Por ello debes tener cuidado de con quien juntarte, puede ser que tu medium tenga como guía a un daimon peligroso y acabe por perjudicarte a ti.
Algunos seres son muy peligrosos, ya sean espíritus o daimons (u otra cosa), dejar que un ser malvado te "mire por dentro", es decir, abrirle la puerta de tu mente y tu alma, depositar tu confianza en ese medium (y por lo tanto, en su espíritu acompañante o guía) es como si le abrieras la puerta a un psicópata a tu vida y todos tus secretos más ocultos. Peligroso ¿verdad?
La ilusión y el auto-engaño
La gente ve en estas historias algo atrayente y es normal, pero la curiosidad mató al gato. No todos están preparados para esto y posiblemente, en vez de evolucionar te pierdas más en ti mismo. Si buscas diversión adelante, pero con cautela, pero si buscas iluminación espiritual, lo mejor es viajar solo.
Lo peor de todo esto no es engañar a los demás y ponerles en peligro, ya seas medium o adivino y trabajes de ello, ya solo con exponerles a ese ser les perjudicas. Podemos hablar también del peligro que podría suponer para tus amigos y familia, pero no, eso no es lo peor. Lo peor es el auto-engaño, creernos nuestra propia mentira e ignorar que todo este berenjenal ha sido creado por nuestra mente, por nosotros mismos. Ahí es cuando la aventura ya no tiene vuelta atrás, hasta que no te topes con la pared y te partas los dientes, no te darás cuenta de la verdad y cruda realidad que te niegas a ver.
No hay seres guía ni nada parecido, tú eres tu propio guía. Sé que puede sonar interesante y "cool" esto de tener tulpas o daimons a tu servicio, pero todo casi siempre acaba mal, no siempre con accidentes o muertes, sino mal psicológicamente o en algún aspecto de tu vida. Vivir una mentira es malvivir, pero algunos no son tan valientes como para afrontar la verdad y mirarla a los ojos. Y para ello, para esos cobardes, están estos "juegos de niños", que lo único que te ofrecen es un laberinto de sensaciones y pensamientos interminable, del cual siempre sales decepcionado y escaldado. Tú eres responsable de tus actos, así que si te decides a probar esto, luego no escondas la mano tras tirar la piedra.




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